trucos de carpfishing para aguas someras

Los mejores trucos de carpfishing
Texto y fotos: Álvaro Felaje Gómez.
En momentos determinados del año nos podemos encontrar grandes ejemplares concentrados en lugares con muy poca profundidad, haciéndonos plantear estrategias en situaciones de pesca diferentes a la habitual. En esta ocasión vamos a abordar el tema de la pesca en aguas poco profundas, demostrando una vez más la diversidad de estrategias del carpfishing, huyendo de los tópicos asociados a esta modalidad no necesariamente ligada a potentes cañas, grandes plomos y lances a noventa metros de la orilla.
Estrategias a seguir
Para delimitar la estrategia más adecuada vamos a diferenciar de modo genérico dos grandes casos.
Para delimitar la estrategia más adecuada vamos a diferenciar de modo genérico dos grandes casos.
1. Pescando en poca profundidad y lejos de la orilla
Podemos estar hablando de una plataforma sumergida a varios metros de distancia, una isla o una recula muy plana en las que los peces deciden estar en ella pero retirados de la orilla. En estos casos la precisión toma un valor fundamental ya que deberemos marcar con exactitud el punto donde vamos a depositar nuestro montaje, bien sea con una caña montada con una boya marcadora, una H-Blocks o en algunos casos algún punto de referencia muy cercano, aunque yo desecharía este último, prefiero marcarlo físicamente, ya que la orientación espacial en el agua cambia sustancialmente respecto de la tierra.
Podemos estar hablando de una plataforma sumergida a varios metros de distancia, una isla o una recula muy plana en las que los peces deciden estar en ella pero retirados de la orilla. En estos casos la precisión toma un valor fundamental ya que deberemos marcar con exactitud el punto donde vamos a depositar nuestro montaje, bien sea con una caña montada con una boya marcadora, una H-Blocks o en algunos casos algún punto de referencia muy cercano, aunque yo desecharía este último, prefiero marcarlo físicamente, ya que la orientación espacial en el agua cambia sustancialmente respecto de la tierra.
Aquí una pequeña diferencia de unos pocos metros de error en el lanzado o la hora de posar nuestro montaje implica, por ejemplo, pasar de estar pescando en una plataforma de cinco metros cuadrados y a un metro de profundidad… a estar pescando en una zona adyacente en la que la profundidad baja a siete metros. Si disponemos de una embarcación provista de una sonda nos facilitará mucho el trabajo a la hora de buscar estos “hot spots” y marcarlas, y ya si dispusiéramos de un GPS para marcar el punto con exactitud, mejor que mejor.
En busca del mejor cebado
Como estrategia de cebado necesitamos, como hemos mencionado anteriormente, ser precisos. Lo mejor sería realizar un cebado concentrado y a su vez liviano, que posea atracción pero que no tenga demasiado alimento que pueda saturar en exceso a los peces. En estos casos podemos utilizar boilies troceados (mejor de alta digestibilidad), algún pellet de pequeño tamaño y partículas. Para estos casos podemos utilizar el ya famoso “the metod” consistente en una masa de engodo o mix mezclado y aglutinado con lo mencionado anteriormente (boilies troceados, partículas, etcétera) en forma de bola. Bien lo podemos insertar directamente en el plomo (existen tipos especializados para ellos), o en el propio hair como si de una malla o bolsa de PVA se tratara.
Como estrategia de cebado necesitamos, como hemos mencionado anteriormente, ser precisos. Lo mejor sería realizar un cebado concentrado y a su vez liviano, que posea atracción pero que no tenga demasiado alimento que pueda saturar en exceso a los peces. En estos casos podemos utilizar boilies troceados (mejor de alta digestibilidad), algún pellet de pequeño tamaño y partículas. Para estos casos podemos utilizar el ya famoso “the metod” consistente en una masa de engodo o mix mezclado y aglutinado con lo mencionado anteriormente (boilies troceados, partículas, etcétera) en forma de bola. Bien lo podemos insertar directamente en el plomo (existen tipos especializados para ellos), o en el propio hair como si de una malla o bolsa de PVA se tratara.
También, aunque de manera menor precisa, podemos cebar con estas “bolas” desde orilla ayudándonos de la caña y un method blaster, consistente en una pequeña catapulta adaptada para lanzar este tipo de bolas. Marcas como Nash, Prowess o Amiaud las comercializan, siendo en mi opinión las dos primeras las más eficaces. También si disponéis de tiempo y habilidad os las podéis fabricar vosotros mismos. Cabe decir que el “qué y cuánto” cebo se va a utilizar variará en función de la presencia de cangrejos, minitalla, etcétera.
El equipo que necesitamos

El equipo a emplear dependerá del tipo de terreno, los obstáculos que haya y el tamaño de los peces, por lo que cada situación de pesca requerirá un tipo en concreto. Lo más importante de todo –siempre y cuando se pueda– será utilizar líneas finas y montajes discretos que no llamen la atención. Debemos tener en cuenta que al haber poca profundidad hay más posibilidades de que el pez se tope con nuestra línea y sospeche. En este caso, la utilización de largos tramos de leadcore nos ayudan a mantener “pegada” la línea en la el tramo más próximo a nuestro cebo.
2. Pescando en poca profundidad y cerca de la orilla
Pueden ser pequeñas reculas con entrada de algún arroyo, canales de paso, orillas de río con abundancia de obstáculos y un largo etcétera, todas ellas con el denominador común de la escasa profundidad y que reúnen algunos de los factores de alimentación, descanso o protección que hace que los peces tengan inclinación por dichos espacios.
Pueden ser pequeñas reculas con entrada de algún arroyo, canales de paso, orillas de río con abundancia de obstáculos y un largo etcétera, todas ellas con el denominador común de la escasa profundidad y que reúnen algunos de los factores de alimentación, descanso o protección que hace que los peces tengan inclinación por dichos espacios.
En este caso la cosa cambia de algún modo respecto al anterior, ya que al factor de precisión debemos añadir un extra de discreción, si estamos hablando de pescar en la orilla, nos estamos refiriendo a escasos diez o quince metros de ésta, por lo que necesitaremos una especial cautela a la hora de movernos por el puesto y a la hora de establecer una línea estratégica que funcione a la hora de engañar a las posibles capturas. Debemos alejarnos de la orilla unos cuantos metros para intentar pasar desapercibidos, ya que una pequeña vibración producida por una piedra, un pisotón en el suelo o un movimiento brusco cerca del agua acabará con la actividad de nuestro cercano “spot”.
Sólo en el caso de que las peces abandonen el lugar o sólo lo ocupen por muy poco tiempo, utilizaremos un cebado un poco más amplio, a base de semillas y pequeños boilies, todo ello bien dispersado por la zona, para entretenerlas y que se mantengan más tiempo en el lugar
Siguiendo con los trucos de carpfishing, también es aconsejable distanciar las cañas unos metros de la orilla, de manera que las podamos tener “a mano” a la hora de producirse una picada, y así actuar de manera rápida para evitar que el pez se enganche en algún obstáculo. En muchos casos cuando nos encontremos en esta situación de pesca nos veremos en la necesidad de bloquear –parcial o totalmente– los frenos de nuestros carretes para así evitar la salida de hilo “innecesario” de la bobina, ya que en lugares con obstáculos, como muchos conocéis, un par de metros puede significar perder un pez. En este punto recordaremos que debemos utilizar sistemas que permitan la liberación del montaje en caso de rotura, y así evitar que el pez pueda quedar enredando en un obstáculo y que le pueda provocar la muerte.
A vueltas con el cebado
Volviendo al tema de cebado y de montajes, utilizaremos sólo un cebado encima de nuestro hair si las carpas están por la zona, ya que no necesitamos atraerlas puesto que ya están ahí. Nuestra misión consistirá en que vean nuestro montaje como algo natural y que no recelen de él. Boilies de pequeño tamaño, de 10 a 15 mm (si no los tenemos de este diámetro los podemos recortar y fabricar a partir de uno más grande). Nos irán muy bien para estos casos, un pequeño snowman con dos boilies de 14 mm y un anzuelo del nº 6 o del nº 8 sería ideal.
Volviendo al tema de cebado y de montajes, utilizaremos sólo un cebado encima de nuestro hair si las carpas están por la zona, ya que no necesitamos atraerlas puesto que ya están ahí. Nuestra misión consistirá en que vean nuestro montaje como algo natural y que no recelen de él. Boilies de pequeño tamaño, de 10 a 15 mm (si no los tenemos de este diámetro los podemos recortar y fabricar a partir de uno más grande). Nos irán muy bien para estos casos, un pequeño snowman con dos boilies de 14 mm y un anzuelo del nº 6 o del nº 8 sería ideal.
Creo que ha quedado más que demostrado que la teoría de “cebo grande pez grande” no se sostiene en la mayoría de los casos, y que si se utilizan boilies de tamaño “maxi” muchas veces es por la presencia de minitalla, y no siempre se consigue evitar. Al fin y al cabo, por muy grande o pequeño que sea el cebo, una carpa de ocho kilos lo tomará igual que una veinte (si quieren, claro).
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